La mayor parte del cannabis que se localiza en Bizkaia estaría destinado a pequeños distribuidores locales y de provincias limítrofes. Su potencia se ha cuadruplicado por la selección genética de las variedades más psicoactivas.
Un estudio de la Universidad de Finlandia Oriental y el Hospital de la Universidad de Kuopio halla más cambios en el cerebro en sujetos masculinos después de 10 años de consumo.